Los primeros blogs se empezaron a crear sobre el año 1994 y la gente escribía en ellos sus vivencias y novedades del día a día.
Desde sus comienzos los blogs han arrastrado un alto porcentaje de deserciones. Hay dos motivos importantes que arrastran a los creadores de un blog a abandonarlo. Por un lado, está la pérdida de la ilusión inicial con que se crean, pensando que un torrente de lectores se van a interesar por él. En muchas ocasiones esto no es así y no se consiguen lectores, de ahí que se decida abandonar el blog.
El segundo de los motivos es por no conseguir el objetivo buscado. Mucha gente crea un blog pensando que va a ser capaz de rentabilizarlo fácilmente y sin esfuerzo. Al no conseguirlo ya podéis imaginar qué pasa con el blog.
¿Quién dijo que en Internet las cosas son fáciles?
Crear un blog por suerte (o por desgracia) es gratis en WordPress y Blogger, las 2 principales plataformas de blogging. Su alojamiento es completamente gratuito y sin fecha de caducidad. Estas facilidades, son de agradecer, pero provocan que aunque no estés realmente convencido de si vas a aprovechar el blog, crees la cuenta y tires adelante. Según Technorati, mas del 90% de los blogs son abandonados antes de los 3 meses de vida.
Luego llegó la imperiosa necesidad de tener un blog porque mejora el SEO de tu web. Vamos por partes. Mejora el SEO de tu web siempre y cuando vayas aumentando tu popularidad general, escribas periódicamente en él, agregando contenido fresco e intentando utilizar bien las palabras clave dentro del blog. Es decir, si creas el blog, escribes dos post y pones 4 imágenes no sirve para nada.
Llegar al publico general y conseguir muchos lectores no es fácil. Rentabilizar un blog tampoco. Todo esto provoca una especie de vertederos de blogs, abandonados o simplemente no actualizados, que no reciben apenas visitas y no aportan nada.
